Un hijo de puta menos
Un dictador menos. La estricta biología ha ejecutado lo que una bala oxidada debiera haber hecho hace mucho tiempo. Pinochet, fascista recalcitrante, acérrimo admirador de Franco y contemporáneo de los sátrapas que gobernaron Sudamérica en la década de los 70-80, murió de un “tardío” paro cardiaco el pasado domingo. Para los despistados recordar que este señor se aupó a la jefatura del gobierno chileno mediante un golpe de estado auspiciado por la administración norteamericana (Nixon). Que la rebelión formaba parte de un plan general para someter a Sudamérica a los intereses USA. Que Salvador Allende, presidente electo de Chile, fue ejecutado y que 5000 personas más fueron apresadas, torturadas y paseadas durante el sometimiento. Que el supuesto caos que reinaba en al país, y que fue la excusa para la sublevación, no fue tal. Que la política de Kissinger (secretario de estado norteamericano) y de la ITT (multinacional arraigada en Chile) se encargaron de desabastecer los mercados y provocar así una sensación de desamparo que legitimara el advenimiento de la bestia. Ahora que ha muerto, y como no podía ser menos, panegíricos y alabanzas engalanan la memoria de este cabrón. Tanto de la derecha que aún no se ha reconciliado con la “democracia”, como de los estúpidos tibios que alegan que al menos dejó una situación económica saneada y una ejemplar transición a la democracia. Cómo me suenan estas palabras. Y es que el fascismo internacional, travestido de “neoliberalismo conservador” tiene claros sus orígenes y deudos. Pues para ellos también mierda. Ya estoy harto de que la sucesión “caos-represión-dictadura-transición” sea la estrategia recurrente del capital para regenerarse y un modelo aceptado y aplaudido. Estoy hasta las narices de que, en aras del entendimiento, sean siempre los mismos los que pierdan y sufran tal ecuación política. Que se reconcilie su padre. A mi no me interesa. Hace tiempo que elegí trinchera y llevarme bien con esta morralla es algo antinatura. Que se joda Pinochet y toda la caterva de plañideras y lisonjeros que le corean. Que se inmolen y sacrifiquen a sus hijos para honrar la muerte de este genocida. Decía Hemingway parafraseando a Donc: “Cuando oigas doblar las campanas, no preguntes por quién lo hacen. Lo hacen por ti, porque formas parte de un todo colectivo que es la humanidad”. Pues yo me niego a formar parte de esa unidad, y más si en ella transitan elementos como estos. Y más que preguntar por quién doblan las campanas, en este caso lo más prudente es indagar por quién tiran de la cadena: un inodoro mugriento y pestilente bien podría haber sido la tumba pareja y proporcional a lo méritos de este inútil. POSTDATA: En el estado español se siguen conservando monumentos fascistas, topónimos con nombres de afectos al régimen, comisarios de la brigada político-social condecorados después de la transición, injustas sentencias judiciales dictadas por tribunales facciosos que se convirtieron en ajustes de cuentas, y que aún no han sido revisados ni derogados, propagandistas que cohonestan el régimen de Franco...El asesino con voz atiplada murió en el 75, pero los hijos de puta que exaltan aquel negro pasaje de la historia siguen también aquí bien vivos.!!QUE SE MUERAN TAMBIÉN!!.
APUNTES AL MARGEN:¿Por qué Frei (presidente chileno), Aznar y Blair se negaron a firmar la extradición de Pinochet de Reino Unido a España en el 98?¿Qué hacen supuestos demócratas dejando impunes las actividades de esta carnicero?
